Si vemos un perro desorientado caminando solo sin nadie que lo acompañe, es importante no mirar hacia otro lado pues probablemente se haya perdido, escapado, haya sido abandonado, o en el peor de los casos necesite atención veterinaria por estar herido.
Es muy importante observarlo, fijarse en el carácter del perro así como si está o no herido, antes de acercarnos a él.
En el 2022, la fundación Affinity volvió a compartir la escalofriante cifra de 288.457 de perros y gatos que fueron desechados por los que se supone algún día asumieron una responsabilidad que no fueron capaces de cumplir por excusas varias que no entraremos hoy a explicar.
Esa cifra no incluye otras especies que también sufren abandono como cobayas, conejos o hurones, entre otros.
En resumen, casi 800 entre perros y gatos son recogidos al día por un servicio de recogida contratado por el ayuntamiento o por alguna asociación o protectora privada y sin ánimo de lucro, en este país, y de ellos solo el 21% son devueltos a sus familias tras ser recogidos. Lamentable.
En la Comunidad Valenciana es obligatorio microchipar a los animales de compañía como bien indica el art. 10 de la Ley 2/2023 de 13 de marzo, de Protección, Bienestar y Tenencia de animales de compañía y otras medidas de bienestar animal. El no haber identificado su animal como marca la ley, es una infracción leve con su sanción correspondiente de entre 100 € y 3.000 €.
Volvamos a cómo podemos ayudar a ese perro que vemos solo, para poder salvarlo. Habrá que observarlo, seguirlo y pensar en cómo podemos “capturarlo”, no siempre es fácil ya que puede estar asustado y tener miedo.
No obstante, nos necesita por lo que el no actuar no debe ser una opción.
Pasos a seguir si nos encontramos un perro solo
La Dra. en Veterinaria y Máster en Etología Gabriella Tami, repasa en el blog de la Fundación Affinity los consejos y pasos a seguir si damos con un perro solo por la calle, empezando por acercarnos a él.
«Si el perro tiene un aspecto sano y no muestra una actitud agresiva podemos intentar acercarnos», explica. «Un perro abandonado o perdido está desorientado, puede asustarse con facilidad y huir si intentamos acercarnos de una forma brusca o directa. Por esta razón, es importante hacerlo poco a poco y evitando los movimientos repentinos».
La experta recomienda utilizar tonos de voz suaves y evitar hablar en tonos amenazantes. «Si disponemos de comida, podemos utilizarla para que el perro se relaje», añade. «En lugar de atraerlo hacia nosotros, es mejor tirar comida lejos para que el perro se vaya acercando a medida que coja confianza».
En épocas como el verano, cuando las temperaturas son altas y hace calor, también puede sernos útil ofrecerles agua, lo que también les ayudará a relajarse en nuestra presencia, según la etóloga. Una vez ya tengamos al peludo cerca, si vemos que tiene buena actitud y está tranquilo, podemos intentar acariciarle y sujetarle.
Preguntar a los vecinos de la zona por si lo reconocen puede ser la manera más rápida de resolver la situación.
Si el caso es más complicado.
No obstante, si vemos que el animal está herido, enfermo o que muestra signos de agresividad, pasaremos a no acercarnos pero sí tomar fotos, vídeos y geolocalizar el lugar del mismo para documentar la existencia de ese perro y tener una trazabilidad del mismo, y en vez de acercarnos nosotros directamente, lo adecuado es llamar a la Policía Local.
La Policía Local que es quien quien tiene la responsabilidad de gestionar la recogida de perros perdidos o abandonados (servicio contratado por el ayuntamiento del municipio donde se encuentre localizado el animal, aseguraros que aplican el sacrificio cero en su término municipal).
También buscaremos en Google la asociación o protectora del municipio para compartir con ella las fotos, vídeos y la geolocalización para que puedan compartir el animal en sus redes sociales y así hacer llegar esta información a sus seguidores. Muchos animales vuelven con sus responsables legales gracias a la difusión de los casos.
“(…) En el caso de que el animal estuviera herido se priorizará su traslado con carácter de urgencia al centro veterinario más próximo para recibir la asistencia veterinaria necesaria. Una vez estabilizado el animal, será entregado a su responsable legal o a la entidad que corresponda (…)” (art. 21.5)
¿Qué hacemos una vez tenemos al perro bajo nuestro control?
Si el perro lleva collar y chapa de identificación, será muy sencillo: es consultar la información y llamar al teléfono de contacto para avisar a su responsable legal que habéis encontrado a su perro y que está a salvo.
«Hoy en día hay chapas modernas donde no encontrarás un número de teléfono sino un código QR que podemos escanear con nuestro smartphone y acceder a la información del responsable legal».
Tanto si no localizamos al responsable legal por teléfono, como si el perro no cuenta con chapa, lo primero que deberíamos plantearnos es esperar en el lugar donde hemos encontrado al perro durante un tiempo prudencial, ya que «es posible que aparezca el tutor que lo está buscando», asegura la veterinaria.
Si no lleva chapa habrá que llevarlo a que se compruebe si lleva un microchip: «el paso siguiente puede ser llevar al perro a la clínica veterinaria más cercana para comprobar gratuitamente si tiene microchip y así localizar a los responsables legales», añade. «Si tiene, el veterinario puede acceder a sus datos y ponerse en contacto con el responsable legal».
Otra opción.
Otra opción es llamar a la Policía local, la Guardia Civil o al Ayuntamiento, ya que si se trata de un perro perdido (y no abandonado), el responsable legal lo estará buscando y es muy probable que haya avisado a las autoridades sobre el extravío. «Ellos también suelen disponer de un lector de microchip y, si el perro lo llevara, se puede contactar enseguida con el responsable legal del animal de compañía».
“Excepcionalmente, en situaciones de emergencia que pudieran comprometer al bienestar de los animales, los ciudadanos y ciudadanas podrán realizar la recogida de modo puntual y desinteresado de un animal abandonado, errante o perdido hasta su entrega final o puesta a disposición del centro de recogida autorizado que la autoridad competente determine” (art. 21.11).
Si se trata de un animal abandonado.
De no tratarse de un perro perdido, sino de uno abandonado, «las autoridades locales pueden avisar al servicio de recogida contratado por el ayuntamiento”, afirma Tami.
“Las funciones de recogida, (…) de animales abandonados, (…), perdidos, (…) corresponden a los ayuntamientos (…) (art. 21.1)”
En ese momento, el animal será trasladado al centro que tenga el ayuntamiento contratado pudiendo ser una empresa privada, un centro de protección municipal o bien una protectora, si es la que lleva el servicio.
Por ejemplo, en Castelló de la Plana, es una empresa privada la que lleva este servicio, se encuentra en Vinaroz y se llama Serproanimal. En Vila-real, sin embargo, la empresa que lleva este servicios es Servican.
En la Comunidad Valenciana los animales de compañía ya no pueden ser sacrificados desde la entrada en vigor de la Ley 2/2023 de 13 de marzo (art. 15 y disposición transitoria primera) pero siempre es importante recordárselo a la autoridad que se lo lleve y preguntar exactamente dónde se lo llevan.
De esta manera podéis ayudar a ese animal haciendo el seguimiento de su destino en la página web o redes sociales del servicio que lo haya recogido.
También podéis solicitar esta información al ayuntamiento correspondiente llamando a la concejalía encargada de la protección animal (puede ser la de sanidad, medio ambiente, protección animal, etc) o por instancia general a través de la sede electrónica o presencial.
Acoger como alternativa.
Otra alternativa que podemos hacer si ayudamos un perro que no tiene microchip es, antes de acudir directamente a las autoridades, ponernos en contacto con alguna asociación o protectora de animales. «La mayoría están saturadas y no se pueden hacer cargo del perro, pero pueden saber si alguien ha llamado para notificar su desaparición», comenta la experta.
«Podemos hacernos cargo temporalmente del perro mientras difundimos la noticia de que lo hemos encontrado o también podemos ayudarlo a encontrar un nuevo hogar a través de carteles en clínicas veterinarias o publicaciones en redes sociales y a través de protectoras», expresa la veterinaria. También podemos ofrecernos para acogerlo temporalmente o adoptarlo».
“Casa de acogida: domicilio particular adscrito a una administración pública, centro de acogida animal o vinculado a una entidad de protección animal, donde se mantienen animales abandonados, (…), perdidos o extraviados para su custodia provisional (…)» (Arts. 5 y 23).
Y ¿si es un gato?
Observar si tiene una marca (un corte recto o una muesca) en la oreja, si es así, es muy probable que haya un punto de alimentación cerca del lugar donde lo hayáis visto y que pertenezca a una colonia cercana al lugar donde estáis.
Los gatos comunitarios o de colonias no son animales abandonados (art. 5) por lo que su gestión es competencia de los ayuntamientos (art. 24), quien a través de los gestores autorizados los cuida. Si queréis ayudar a esos gatos, podéis contactar con la asociación del municipio y avisarles donde habéis visto al gato. Es muy importante hacer fotos y geolocalizarlo.
Si no lleva ninguna marca, está herido, maúlla, os viene al encuentro, probablemente sea un gato abandonado, perdido o autopaseante (gato con responsable legal al que dejan salir y que se puede extraviar). En este caso, seguid los mismos pasos que os hemos mencionado antes, pues necesitará que se le ayude.
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